Quién supiera dar color a los sueños blanco y negro,
y pintar en unos versos aquel azul tan profundo,
quién describiera del mundo la belleza más sublime,
y del color de una nube guardara el sutil aliento.
Quién pudiera despertar en el rubor de una rosa
o en el mar que se deshoja en una tarde cualquiera,
quién en la noche pudiera perseguir algún suspiro
o arrebatar al olvido el vuelo de una paloma.
Quién pudiera desvelar el misterio que se oculta
en una gota de lluvia o en una noche de invierno
y amanecer sobre el sueño de irrepetibles fragmentos
desenvueltos en pequeños universos en la bruma.
(Ana María Gregorio)
miércoles, 27 de mayo de 2009
martes, 19 de mayo de 2009
jueves, 14 de mayo de 2009
LA LUNA
La luna siempre se aleja,
marcha siempre mar adentro
con la mirada perdida,
envuelta en su velo negro.
Escondida tras la nada
deja un tremendo silencio,
el eco con que murmura
soledades y misterios.
La luna camina siempre
con sus ojos verdinegros
y su reflejo de plata
es un sendero desierto.
(Ana María Gregorio)
marcha siempre mar adentro
con la mirada perdida,
envuelta en su velo negro.
Escondida tras la nada
deja un tremendo silencio,
el eco con que murmura
soledades y misterios.
La luna camina siempre
con sus ojos verdinegros
y su reflejo de plata
es un sendero desierto.
(Ana María Gregorio)
sábado, 9 de mayo de 2009
miércoles, 6 de mayo de 2009
EL TIEMPO DERRAMADO
El tiempo derramado,
se ha volcado la vida.
Al volver la vereda
me ha mirado la luna
con los ojos de mármol,
reflejos de la noche.
Futuros sucesivos,
en ayeres tornados,
acechan tras las luces
de indiscretas farolas,
con el alma encendida,
los ojos apagados.
En el reloj de arena,
el tiempo derramado.
(Ana María Gregorio)
se ha volcado la vida.
Al volver la vereda
me ha mirado la luna
con los ojos de mármol,
reflejos de la noche.
Futuros sucesivos,
en ayeres tornados,
acechan tras las luces
de indiscretas farolas,
con el alma encendida,
los ojos apagados.
En el reloj de arena,
el tiempo derramado.
(Ana María Gregorio)
lunes, 4 de mayo de 2009
sábado, 2 de mayo de 2009
ELOGIO DE LO EFÍMERO
Suscribirse a:
Entradas (Atom)