miércoles, 27 de mayo de 2009

IMAGENES

Quién supiera dar color a los sueños blanco y negro,
y pintar en unos versos aquel azul tan profundo,
quién describiera del mundo la belleza más sublime,
y del color de una nube guardara el sutil aliento.

Quién pudiera despertar en el rubor de una rosa
o en el mar que se deshoja en una tarde cualquiera,
quién en la noche pudiera perseguir algún suspiro
o arrebatar al olvido el vuelo de una paloma.

Quién pudiera desvelar el misterio que se oculta
en una gota de lluvia o en una noche de invierno
y amanecer sobre el sueño de irrepetibles fragmentos
desenvueltos en pequeños universos en la bruma.
(Ana María Gregorio)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Enhorabuena por tu blog, Ana. Me encanta la sutileza con que tratas cualquier tema, tanto en poesía como en pintura. Por supuesto, seguiré visitándote. Un fuerte abrazo. Noelia.